Juan Erviti, Luis Carlos Saiz, Leire Leache, José Pijoan, Miguel Menéndez Orenga, Douglas M Salzwedel, Iván Méndez-López
Mensajes clave
Reducir la presión arterial en personas con hipertensión (tensión arterial alta) es beneficioso para la salud. Pero no sabemos en qué medida deben reducirse los objetivos de presión arterial para las personas con hipertensión y enfermedad renal crónica.
En comparación con los objetivos estándar de presión arterial, los objetivos intensivos (más bajos que los estándar) probablemente no reducen las muertes, los acontecimientos graves no deseados y perjudiciales, ni los acontecimientos cardiovasculares (problemas que afectan al corazón y los vasos sanguíneos) en las personas con enfermedad renal crónica. Es posible que los objetivos más bajos no reduzcan las muertes relacionadas con problemas cardiovasculares ni ralenticen el empeoramiento de la enfermedad renal.
¿Qué es la enfermedad renal crónica?
La enfermedad renal crónica es una afección a largo plazo en la que los riñones están dañados y no filtran la sangre tan bien como deberían. La enfermedad renal crónica puede empeorar con el tiempo y, finalmente, los riñones pueden dejar de funcionar por completo. La hipertensión (tensión arterial inusualmente alta) es la segunda causa más frecuente de enfermedad renal crónica después de la diabetes.
¿Cómo se trata la insuficiencia renal crónica?
No existe cura para las personas con hipertensión arterial y enfermedad renal crónica, pero reducir la presión arterial puede ayudar a retrasar la progresión de la enfermedad renal. Sin embargo, aún no están claros los niveles óptimos de presión arterial.
¿Qué queríamos averiguar?
Queríamos averiguar si reducir la presión arterial por debajo de los niveles estándar es mejor que mantener los niveles estándar de presión arterial para prevenir la cardiopatía, la progresión de la lesión renal y la muerte en personas con hipertensión arterial y enfermedad renal crónica.
¿Qué se hizo?
Se buscaron estudios que investigaran los beneficios y los daños de reducir la presión arterial en adultos con enfermedad renal crónica. La presión arterial se registra en dos cifras, como 120/80. La primera cifra es la presión en el corazón. La primera cifra es la presión en las arterias cuando el corazón bombea sangre en cada latido, y se denomina «presión arterial sistólica». La segunda cifra es la presión cuando el corazón se relaja antes del siguiente latido, y se denomina «presión arterial diastólica». Una lectura de 130/80 mmHg («mmHg» es una unidad común de medida de la presión arterial) se considera un objetivo de presión arterial baja en el contexto de las personas con enfermedad renal e hipertensión arterial. Se reunieron estudios que compararon a las personas asignadas a objetivos de presión arterial baja (130/80 mmHg o menos) con las asignadas a niveles de presión arterial estándar (140 a 160/90 a 100 mmHg). Se compararon y resumieron los resultados de los estudios y se calificó la confianza en las pruebas. Esta revisión no recibió financiación.
¿Qué hemos encontrado?
Se encontraron seis estudios con 7348 personas con enfermedad renal crónica e hipertensión arterial. El estudio más grande incluyó 4733 personas relevantes para nuestra revisión, y el estudio más pequeño, 840 personas. Se realizó un seguimiento de los participantes durante uno a ocho años.Tres estudios se realizaron en EE.UU., uno en EE.UU. y Canadá, uno en varios países de América junto con España, y uno en América, Europa y el Sudeste Asiático.Tres estudios contaron con financiación pública, dos con financiación privada y uno con financiación tanto pública como privada.
Se descubrió que, en comparación con los niveles estándar, los objetivos de presión arterial más bajos probablemente suponen poca o ninguna diferencia en el número de personas que:
- mueren por cualquier causa;
- tuvieron acontecimientos graves no deseados y perjudiciales;
- tuvieron eventos cardiovasculares, como ictus e infarto de miocardio, o problemas en arterias y venas.
Unos objetivos de presión arterial más bajos pueden suponer una diferencia mínima o nula en el número de personas:
- que mueren por problemas cardiacos;
- cuya enfermedad renal empeora;
¿Cuáles son las limitaciones de las pruebas?
Una limitación principal de las pruebas fue que los seis estudios permitieron a los participantes y a los médicos saber a qué grupo de tratamiento se asignó a cada participante. Además, los estudios proporcionaron muy poca información sobre acontecimientos graves no deseados y perjudiciales. Todos los estudios midieron la presión arterial de las personas en consultorios médicos, y los resultados podrían diferir si la presión arterial de las personas se mide en diferentes entornos (por ejemplo, en el domicilio).
¿Hasta qué fecha están actualizadas las pruebas?
Las pruebas son actuales hasta el 8 de agosto de 2023.
Lea la revisión (en inglés): Objetivos de presión arterial para la hipertensión en personas con enfermedad renal crónica
Erviti J, Saiz LC, Leache L, Pijoan JI, Menéndez Orenga M, Salzwedel DM, Méndez-López I. Blood pressure targets for hypertension in people with chronic renal disease. Cochrane Database of Systematic Reviews 2024, Issue 10. Art. No.: CD008564. DOI: 10.1002/14651858.CD008564.pub3. Accedido el 15 de octubre de 2024.